Cuando quieres lanzar un proyecto llegará un punto en el que deberás determinar a qué tipo de cliente quieres ofrecerle lo que vendes.
Y llegado ese punto normalmente hay 2 opciones:
Opción 1:
Ofrecérselo a un público que no puede permitirse lo que quieres que te paguen
Opción 2:
Ofrecérselo a un público que SÍ puede permitirse lo que quieres que te paguen
Si no te ha quedado claro, lee las 2 opciones de nuevo porque es importante para contestar a la siguiente pregunta
¿Si fuera tu caso qué escenario eliges el uno o el dos?
Te doy unos segundos para pensar porque lo que viene a continuación no es sencillo.
Listo
Si al tomar cerveza no eliges cruzcampo, si al viajar en avión intentas evitar ryanair o si cuando vas a comer huyes del Rodilla (por dios a quién le gustan los sandwiches del rodilla) casi seguro elegido la opción 2.
Porque la opción 2 es la opción inteligente
No solo eso, es la opción lógica
Y además la que te va a permitir tener un negocio de verdad y no un hobbie que te haga perder dinero y fuerza
Pues aún con todo eso hay gente que elige la opción 1 e intenta vender sus servicios a gente que no los valora, o que no está dispuesto a invertir en ello o que directamente no entiende que esos servicios cuestan dinero.
Y para que tú nunca dudes entre elegir la opción 1 o la opción 2 te presento y presento a tu cerebro el concepto / asociación de AFOL, que significa ADULTS FUN OF LEGO, traducido al español “Adulto al que le gusta LEGO”.
Sí, LEGO lo de los juguetes por piezas
¿Por qué te digo esto?
Porque esos Adultos a los que les gusta LEGO no solo están dispuesto a pagar ingentes cantidades de dinero por piezas de plástico apilables sino, como comentaba en la opción 2, pueden permitírselo.
Y por eso LEGO crea sets de SONIC, de Friends o de Star Wars sin parar a precios de 60, 600 o 1.000 €.
Lego los crea
Los AFOL los pagan
Lego gana mucha pasta
Cuando vuelvas a dudar, piensa en LEGO
Y si lo que no tienes es ni idea de cómo localizar ese público que está en el escenario 2, es decir, un público que SÍ puede permitirse lo que quieres que te paguen me dices y lo analizamos juntos. Hago mentorías para proyectos que quieren seguir creciendo.